Cada vez es más caro: el pasado mes de junio la inflación es España se elevó al 10,2%, y los pronósticos para el presente mes de julio no son mejores. Los principales impulsores de los precios son los de la energía, pero los precios de los alimentos también aumentaron a un ritmo superior al del año anterior.
Sin embargo, el aumento de los precios no sólo lo sentiremos en la gasolinera y el supermercado, sino también los asegurados, que con toda probabilidad sentirán los efectos de la subida de precios. Las consecuencias del enorme aumento de la inflación se reflejarán también en casi todos los ramos del sector asegurador a corto y medio plazo.
El mayor aumento en 51 años
Todos los ramos de seguros se ven afectados por la elevada inflación, que alcanzó tal nivel por última vez durante la primera crisis del petróleo en 1973/74. Los efectos son especialmente evidentes para las aseguradoras de daños, que tienen que hacer frente a unos costes de reparación y de artesanía más elevados.
El aumento de los costes de las piezas de recambio y de las reparaciones también se refleja en los seguros de automóviles, ya que el índice de costes de reparación del motor ha aumentado notablemente en los últimos tiempos. Los problemas de la cadena de suministro de componentes electrónicos, en particular, han provocado importantes subidas de precios en los últimos tiempos.
Que las aseguradoras repercutan estas subidas de precios a sus clientes en forma de primas más altas es obvio, pero según los actuarios, no es una conclusión inevitable. Sin embargo, de estos datos no se pueden derivar previsiones generales sobre la evolución futura de las primas, ya que el alcance y la velocidad de los ajustes de precios son muy individuales para cada empresa.
Efectos en los seguros médicos privados
También es probable que la inflación repercuta en los seguros de salud privados a medio plazo. El principal motor de los ajustes de las primas es el progreso médico y técnico, que es independiente de la inflación. Sin embargo, es probable que los costes de los medicamentos y los remedios sigan aumentando debido a la elevada inflación. También está por ver qué consecuencias tendrá la evolución de la inflación en los próximos acuerdos salariales y, por tanto, en los costes salariales del sector sanitario. Esa es la gran incógnita de todos los modelos actuales.
Sin embargo, es probable que los efectos de la inflación no se reflejen en las primas de los seguros hasta 2024, como muy pronto. Para cualquier ajuste de las primas en el próximo año, los datos de 2021 serían decisivos. Además, los ajustes de las primas dependen en gran medida de la composición del grupo, así como de la evolución de los costes en las respectivas empresas, por lo que es probable que la evolución varíe de una aseguradora a otra.