Lloyd’s de Londres se enfrenta a una gigantesca batalla legal por los cientos de aviones robados por el presidente ruso Vladimir Putin.
Decenas de demandantes, entre ellos la familia real gobernante de Dubai, han presentado demandas por valor de miles de millones de libras contra el histórico mercado de seguros y aseguradoras como AIG y Chubb.
El caso, el mayor litigio de la historia en materia de seguros de aviación, se inició después de que el Gobierno de Putin confiscara más de 400 aviones occidentales por valor de 8.000 millones de libras tras la invasión de Ucrania el pasado mes de febrero. Se alega que la acción de altos cargos del Kremlin fue una represalia contra las sanciones del Reino Unido y la UE.
Putin expuso su postura en un discurso público el pasado mes de marzo, cuando subrayó que «los aviones arrendados en el extranjero no se devolverían a los arrendadores extranjeros».
El objetivo del Kremlin era mantenerlos como fuente de piezas de repuesto para las aerolíneas rusas -como Aeroflot, ex patrocinador del Manchester United-, que ya dependen en gran medida de los aviones extranjeros arrendados.