El presidente de Mapfre, Antonio Huertas, ha admitido que la compañía subirá este año las primas de los seguros de coche, el negocio más importante del grupo, que según dice está perdiendo dinero en tecnología por la subida de costes. La compañía por tanto traslada a los consumidores los efectos de la inflación, algo que desgraciadamente parece que será la tónica habitual en el sector.
Huertas advirtió que Mapfre no será la única empresa que suba los precios. El beneficio atribuido de Mapfre en 2022 fue de 642 millones de euros, un 16,1% menos que el año anterior. La caída en las ganancias se debió al impacto de la inflación en sus cuentas, así como a un aumento en las reclamaciones de seguros de automóviles y eventos catastróficos. En cualquier caso, el tono empresarial del primer grupo asegurador español sigue siendo favorable. Los ingresos aumentaron un 8,3 por ciento hasta los 29.510 millones de euros, un nuevo récord para la empresa. Las primas aumentaron un 10,8% hasta más de 24.540 millones de euros.
Antonio Huertas, ha asegurado en la presentación de resultados de la compañía que el encarecimiento de los costes ha provocado que las primas que la compañía cobra por sus seguros de autos no sean suficientes. «Muchas de ellas venían de cálculos de siniestralidad postpandemia, cuando se utilizaba menos el coche, pero con la recuperación de la normalidad se ha visto que no son bastan para cubrir el coste de los siniestros».
Las compañías desoyen las peticiones de la Dirección General de Seguros
Con este decisión la compañía no duda en repercutir a sus clientes los costes de la inflación, desoyendo la petición expresa que sólo hace unos meses efectuó el subdirector general de Inspección de la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones, José Antonio Fernández de Pinto, quien solicitó a las aseguradoras que opten por una visión largoplacista y no se apresuren a trasladar a las primas de sus clientes el impacto de la inflación.